
Conclusión
La conducta abusiva, el acoso y la discriminación son situaciones que generalmente se denuncian primero a un supervisor o que este debe advertir con antelación.
Algunos tribunales han determinado que los supervisores pueden considerarse personalmente responsables cuando no adoptan medidas ante una queja. En otras palabras, se puede obligar tanto al supervisor como a la organización a pagar daños monetarios.
Por lo tanto, desde un punto de vista personal, es importante que siga nuestras políticas y procedimientos y aplique lo que ha aprendido para protegerse frente a este tipo de riesgo.